
Nuestras almas separadas
por la distancia
el silencio orada nuestros
cuerpos.
¡ Qué loca ilusión querernos,
como nos queremos!
Todo lo tuerce el destino,
tu camino y el mío
torcidos.
Me piensas y te pienso
lloro y lloras este designio.
El silencio nos atraviesa
más no llega el olvido.
Qué tristeza saber que seguimos
siendo unidos
y aunque no pueda tenerte
sigo contigo
como tú sigues siendo mío.
Suyai 2012