martes, 22 de junio de 2010

Divago.


Ya no puedo amarte
me he quedado
sola como en un
desierto.
Frágil me veo
acurrucada,
inclinada,
ondulada
en un ovillo
como si fuese lana.
La gélida temperatura
me congela,
me arrimo a tu recuerdo
siento la dulce tibieza
de tu cuerpo.
Mis sentidos se agudizan
huelo en el aire
tu aliento,
más ¿qué digo?
divago
en esta oscura noche
muero.
Ya no tengo pesares
una subrepticia hora
me recuerda
que estoy perdida
anulada,
dejo que mi alma
se vaya
voy subiendo la bruma
voy escalando
la muralla
está oscuro el sendero
el silencio viene
me abraza.

Suyai 2010 copyright

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